‘‘[…] una obra (acaso una revelación) que invoca un baile para subvertir el oído individual y también el colectivo. Quien quiera poesía para alimentar burocracias, que no se equivoque, pues a esta escritora le interesa más “levantar sábanas que plancharlas”, Edgar Borges, El Plural.
En un lugar limítrofe describe un exilio interior. Un viaje iniciático, desde la luz dorada del atardecer hasta la hora blanca del alba, donde la voz poética se enfrenta a su deseo de revolución afectiva y al peso de la tradición romántica.
Pongamos que hablo de un exilio
Digamos que pongo una distancia
La voluntad no lo vuelve apacible
Creo que los besos se dan en la boca
porque es de donde brotan las palabras.
Si te besara la punta de los dedos
estaría buscando una caricia.
Si te besara la suela del zapato
estaría buscando un camino.
Si te besara los párpados cuando estás dormido
estaría pidiendo permiso
para entrar en tus sueños.
Pero te estoy besando los labios
porque prefiero escuchar mis palabras salir de ti.
Otra vez
Si te besara la planta de los pies
buscaría un paso en falso.
Si te besara la parte interna del codo
buscaría tus cubículos.
Si te besara la sombra
no sabría lo que busco
pero estaría tan cerca.
Si te buscara esta noche
besaría a cada extraño
hasta encontrarte.
Otra vez
Si te besara
sería escurridiza por un lienzo carne que se desborda
y que se expande por las vigas de mi casa.
Treparía escurridiza por un muro fronterizo entre
la piel de la carne que se inyecta
en una estructura impersonal llamada nombre.
Estaría consumida antes siquiera de abrir los labios si te
besara
y no podemos hacer nada por esta muerte,
por esta muerte
Menos
Si te besara
sería escurridiza por un lienzo carne que se desborda
y que se expande por las vigas de mi casa.
Treparía escurridiza por un muro fronterizo entre
la piel de la carne que se inyecta
en una estructura impersonal llamada nombre.
Estaría consumida antes siquiera de intentarlo.
Invocaría un cataclismo sólo con pronunciarlo
y por eso
por eso
me guardo quieta
quieta
atenta
al tanto
alerta
por si acaso
por si acaso
hubiese atisbo
de encontrar el punto medio
entre los muros
donde
shhhhhhh
no hacernos daño.
Donde solo darnos cuenta
de hasta dónde
llega el beso
antes
de que llegue
la rabia.
¿Cómo de inútil sería
invocar el bosque desde el papel?
¿Cómo de inútil
replicar la voz del viento
desde el lenguaje?